Desde que supimos la fecha exacta de la comunión de mi hija Lucía, mi cabeza ya empezó a dar vueltas para que fuera diferente a la de su hermana mayor, Paloma. La experiencia adquirida en su primera comunión me hizo darme cuenta de que esta vez, con la de Lucía me debía poner las pilas si quería que tanto los regalos como los detalles de la misma, fueran diferentes y únicos para ese día tan especial.
Mi madre me echó una mano y me ayudó a cambiar el aspecto del vestido. El cambio consistió en quitarle el fajín y las flores que llevaba y ponerle un lazo de diferente color, en concreto un rosa palo usando una tela con mucha caída. Para completar el nuevo look del vestido, pedí por Internet, en Mirthashop, una corona y un aplique para el fajín. Tras unos cuantos correos intercambiados con la tienda, al final llegó a casa la preciosa corona de flores y el aderezo para el fajín. Me encantaron, y en su web tenéis muchos más modelos.
Para mi hija
mayor, que ya tiene 14 años, toda una señorita, no teníamos claro qué llevaría
en el pelo, pero mirando "San Pinterest" encontré unas diademas con perlas y
abalorios divinos que viendo tutoriales por Internet, me decidí a hacer. Pensé que no podía ser tan
difícil, y bien, un poco difícil sí me ha sido, pero estoy muy contenta con el
resultado y ella también. Ahora se pasa el día diciéndome que tendría que dedicarme a ello y verderlas por Internet, ja ja.
Diadema y aplique a juego para el fajín
Diadema de perlas y cuentas de cristal que le hice a Paloma
Llegado este
punto de creatividad acelerada, yo tampoco tenía muy claro qué ponerme en la
cabeza, ¿un tocado, un sombrero, una peineta o mejor una flor? Estaba hecha un
lío y en casa no me ayudaban a decidirme. Así que volví a echar mano de
Pinterest y encontré unos monísimos canotiers adornados con flores y velo plumeti,
pero otra vez cuando miraba el precio era excesivo, y decidí hacermelo yo.
Me fui a Barcelona y allí encontré en la tienda los materiales necesarios por menos de 15 €.
Diadema de plumas montada sobre fieltro.
Cuando le pregunté a mi pequeña qué galleta de comunión le gustaría que le hiciera, me sorprendió diciéndome, -mamá quiero que mi comunión vaya de unicornios- !¦. Y después de abrir mucho la boca y los ojos, le dije que tendría las galletas de comunión con unicornios más bonitas que hubiera visto.
A conjunto con el color de su vestido hice estas galletas para ella, para que las repartiera entre los invitados. Les encantaron, sobre todo las de unicornio. Tanto, que no pude traerme ni una a casa para guardarla, me despisté.
Estas son las galletas embolsadas y con las etiquetas puestas.
Botella de cava con etiqueta recordatorio de la comunión.
Fue un día muy bonito, de mucha ilusión, y con muchos nervios para que todo saliera bien y para que mi hija disfrutara de su día. Espero que os guste este post y os sirva si queréis ideas para personalizar vuestros regalos, vuestras galletas o los complementos. Un beso.
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