Cerdo agridulce

Hoy os traigo una receta que gusta mucho en casa, se trata de el archiconocido cerdo agridulce, sí, ese que encontramos en todas las cartas de los restaurantes chinos. Pero el mío es casero y no lleva glutamato, ese potenciador de sabor que ellos usan en muchos de sus platos.

Cuando siendo adolescente empecé a probar la comida china, fue un descubrimiento maravilloso para mis papilas gustativas, maravilloso hasta que a los diez minutos de empezar a comer me empezaba un picor y hormigueo por la nuca que era muy desagradable. Cada vez que comía comida china me pasaba lo mismo, y era un fastidio por que me gustaba mucho.

Le consulté a mi médico de cabecera y más tarde al alergólogo por aquello que me pasaba y ambos coincidieron en que lo más posible era que fuera alérgica al glutamato. El glutamato monosódico (E621), está presente en nuestra comida de forma natural pero en 1908 el profesor Kikunae Ikeda lo aisló como una nueva sustancia gustativa designando su sabor como umami. El glutamato o GMS como también es conocido, potencia otros compuestos activos de sabor presentes en la comida, lo que ayuda a equilibrar y armonizar el sabor de determinados platos. Es decir que los hace más apetecibles.

Dejé de comer comida china unos años y ya de mayor volví con miedo a probarla, pero cual fue mi sorpresa, que no me volvió a pasar aquello. Aunque aún hoy, cuando pido algún plato en estos restaurantes con una salsa oscura me pregunto si me volverá la alergia.

Y por que me encantan esta comida y no quiero dejar de disfrutarla he preparado este cerdo agridulce casero. Espero que os guste y lo disfrutéis en cada bocado.

Elaboración:

Cortar la carne en tacos de bocado y poner a macerar en seis cucharadas soja y un diente de ajo machacado durante una hora. Remover a la media hora para que toda la carne coja bien el macerado.

Pelar las zanahorias y cortarlas en juliana, cortar también en juliana el pimiento. Ahora podéis añadir la cebolla cortada toscamente si os gusta. Yo he preferido no ponerla. De la lata de piña en almíbar que habremos comprado sacar cuatro rodajas y cortarlas en trocitos. Guardar la mitad del líquido y los trozos de piña. En un cazo poner a hervir la zanahoria con el pimiento unos minutos, con cinco o seis minutos será suficiente, en el líquido del almíbar (aproximadamente la mitad de la lata). Por último antes de retirar el cazo del fuego echar los trozos de piña que teníamos cortados.

En un wok, (yo no tengo y lo hago en sartén) poner el cerdo escurrido de la soja a dorarse en cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen. Verter el líquido del cazo en el wok o sartén y llevar a ebullición. Diluir la Maizena en tres cucharadas de salsa de soja y dos de vinagre de Módena y verterla en el cerdo, a continuación el vino blanco. Hervir todo a fuego vivo hasta que que quede una salsa.

Lo podéis acompañar de arroz blanco, fideos Vermicelli o como yo, con unos espaguetis. ¡Buen provecho!