Galette bretonne

Después de descubrir lo fácil que es hacer unas deliciosas crêpes con trigo Sarraceno mi siguiente receta no podía ser otra que una galette bretonne, o lo que traducido a ingredientes viene a ser una crep rellena de queso, jamón de York y un huevo.

Según la versión y el la mano que lo hace el huevo puede ir frito o directamente sobre la crêpe en crudo. Yo he elegido ponerlo en crudo y está delicioso.

Mi toque personal se lo he dado incorporando cebolla carameliza con vino tinto.... no tengo palabras para describir lo bien que le va a esta crêpe.

Con la cantidad de masa que os pongo da para hacer entre 10 y 12 crêpes, depende del diámetro que las hagáis. Como no tengo sartén para crêpes, pues me he apañado con la sartén más grande que tengo, de 28 cm.

Cada vez que hagáis una tendréis que impregnar ligeramente la superfície con manteguilla y ayudaros de una paleta o espátula de silicona para doblar los bordes y que quede una especie de sobre cerrado en los extremos. Pronto se le coge el truquillo de hacerlos, no temáis, es "mu" fácil.

El trigo Sarraceno es un pseudocereal, por lo cual no tiene gluten, y si la hacéis toda con esta harina es apta para celíacos. En mis pruebas previas a estas tortillas/crêpes al intentar doblarlas se me partían y no quedaban como yo quería. Así que le he añadido un poco de harina de trigo común para que le aportara la elasticidad del gluten y así las pudiera soblar sin que se me rompieran.

Si os gusta esta receta espero vuestros comentarios o fotos de cómo os ha quedado, me encantará verlas y compartirlas en redes sociales. ¡Hasta la próxima receta!

Elaboración:

Primero haremos la cebolla caramelizada, por qué es lo que necesita más tiempo en el fuego. Para ello, cortaremos en macedonia (trozos pequeños) la cebolla y la pondremos en una sartén junto con el azúcar, el vino tinto y el aceite. Dejaremos que se vaya haciendo a fuego lento, en torno al número 5 de la vitrocerámica. Removiendo de vez en cuando para evitar que se queme. Si es necesario añadir algo de agua hasta que la cebolla quede blanda. Esto nos llevará entre 15 y 20 minutos.

A continuación ya podremos hacer las galettes en la sartén o crepera. Impregnaremos el fondo con mantequilla y retiraremos el exceso con papel de cocina.

Echaremos un cazo por crepe y repartiremos con una espátula de silicona la crema por toda la superfície.

Cuando los bordes empiece a levantarse le daremos con cuidado la vuelta y entonces echaremos el queso rallado, dejando el centro de la crêpe sin queso para que quepa el huevo e intentaremos sacar la clara por encima del queso que acabamos de poner. Así, el huevo se hará antes y tendremos este ingrediente por toda la crêpe. Yo he usado un tenedor.

Añadiremos el jamón de York alrededor del huevo y por último la cebolla que tenemos caramelizada. Si queréis, un poco de pimienta blanca molida y a continuación iremos doblando los bordes con ayuda de una espátula de silicona o similar hasta que quede con forma cuadrada como muestro en las fotos.

Nuestra galette bretonne ya está terminada. ¡Bon appetit!

Nota: En el tiempo de elaboración no está incluído el tiempo de reposo necesario para la masa.