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Plato para 8 personas/Preparación: 120 min
Ingredientes:
- 20 gr. de levadura fresca de panadero (6 - 7 gr. si es seca)
- 100 ml. de leche templada.
- 80 ml. de agua templada.
- 500 gr. de harina de fuerza.
- 2 huevos medianos.
- 1 chdta. de miel.
- 6 gr. de sal
- 50 gr. de azúcar moreno.
- 1 chda. de extracto de vainilla.
- 150 gr. de mantequilla, textura pomada.
- 150 gr. de azúcar perlado.
Gofres belgas estilo Lieja (Liège Belgian waffles)
Desde el día que muchos de vosotros me visteis haciendo el vídeo del unboxing de mi máquina de hacer gofres en Facebook no he parado de preparar gofres. El siguiente unboxing será una cinta de andar, ja ja ja, para perder todo lo que gano con las pruebas de mis dulces.
Verdaderamente Bélgica es un país para golosos, doy fe, podéis ver mi visita a este país en mi blog, desde los famosos gofres hasta enormes galletas o deliciosas tartas de queso. Mi marido iba fotografiando la ciudad y yo sus dulces.
No se si sabéis que existen dos tipos de gofres, están los llamados de Bruselas, en cuya masa se incorporan claras de huevo batidas a punto de nieve, que quedan muy crujientes; y estos que os enseño hoy, los de Lieja, cuya masa es mucho más densa -tipo pan-, que al incorporar azúcar perlado y larga fermentación le dan un sabor espectacular. Os puedo decir que probé en la ciudad de Lieja un gofre al estilo de Lieja y me gustó menos que los que probé en los establecimientos que venden este dulce cerca de la Grote Markt (Gran plaza) de Bruselas.
Si tenéis gofrera, idla desempolvando y los que no la tenéis pero os apasiona este dulce, no dudéis en compraros una. Yo me he decidido por una Domo que compré por Amazon, con regulador de temperatura y antiadherente.
He hecho un vídeo para que veáis lo fácil que es hacer nuestros propios gofres en casa. Espero que os guste y me comentéis vuestras dudas o consultas y, si os gusta, le deis a 'Me Gusta' y lo compartáis en vuestras redes sociales.
Elaboración:
Deshacer la levadura fresca o la seca -según el caso- en la mezcla de leche y agua, que tendremos templada. Hidratar unos diez minutos antes de incorporarla a la harina.
En una fuente grande o recipiente del robot de cocina, echar la harina junto con la sal y el azúcar moreno. Mezclar unos segundos con el gancho de amasado, que será el que usaremos para hacer la masa.
Verter el líquido con la levadura ya hidratada en la harina, incorporar los huevos, la miel y el extracto de vainilla. Mezclar todo hasta que quede bien integrado (3-5 minutos).
A continuación echaremos la mantequilla en textura pomada, acordaros de sacarla con antelación de la nevera.
Seguiremos mezclando con el gancho hasta que nos quede toda la mantequilla integrada y la masa sea lisa, brillante y algo pegajosa.
Llegados a este punto taparemos la masa con papel film transparente o con un trapo de algodón para dejar a la masa fermentar y que doble su volumen. En verano con 45-60 minutos serán suficientes, pero en invierno nos costará más y nos puede llevar hasta hora y media.
Cuando haya doblado su volumen la meteremos toda la noche en la nevera. A la mañana siguiente o cuando a vosotros os vaya bien (o el hambre ya no os haga poder esperar más), pues la sacáis de la nevera, la dejáis una media hora fuera para que coja temperatura y le incorporáis el azúcar perlado con la mano. Veréis como se desgasifica la masa en ese momento.
Enchufar la máquina de los gofres, yo siempre la pongo al máximo para que se caliente bien y luego la pongo entre temperatura media y máxima para cocerlos.
Hacemos porciones de unos 100 gramos, más o menos, dependiendo del hambre que tengáis, y las pasáis a la "gofrera". Aunque es antiadherente yo siempre la pincelo con un poco de mantequilla o con aceite de girasol.
Ahora solo nos resta esperar unos tres o cuatro minutos para poder disfrutar de unos deliciosos gofres de Lieja, crujientes, contundentes y muy muy sabrosos. Los podéis acompañar de azúcar glas, nata montada, fruta fresca, chocolate, caramelo, leche condensada, siropes ..... ¡la imaginación al poder!.
Notas:
* Esta máquina para preparar gofres no se pega nada, pero eso no quita que al utilizar en esta receta azúcar perlado, el que queda sobre la placa se va quemando y poniendo negro, con lo cual tendremos que ir limpiando con una servilleta de papel y mucho cuidado de no quemarnos los restos de azúcar que van quedando negros.
* Para limpiar las placas una vez hecha toda la masa será necesario dejarla enfriar, con lo cual el azúcar se cristalizará y un truco que os doy para limpiarlo es utilizar un cepillo de dientes (sin usar, claro) para limpiar entre hueco y hueco. Yo pongo un poco de agua en la superficie, la dejo unos 10 minutos y luego con mucho cuidado voy limpiando con el cepillo de dientes la superficie. Tiro el agua con cuidado al fregadero y continuo con papel de cocina que froto contra la placa con ayuda del cepillo, ya que los dedos difícilmente entran.
* El reposo en la nevera de al menos 12 horas le da a la masa un gran sabor, aunque si tenéis prisa en comerlos, que lo entiendo, creedme, la podéis dejar reposar cuatro horas. La preparáis en el desayuno y para la merienda estará perfecta.
* La cantidad de masa que pongo para cada gofre es orientativa y si los queréis más grandes, pues nada, echar más masa y a disfrutar.
* Una vez hecho el reposo en la nevera, tendréis que sacar la masa con al menos media hora de antelación, para que coja temperatura y sea más fácil incorporar el azúcar perlado.
* Aunque la máquina se puede guardar verticalmente os irá bien haceros con una goma elástica, para sujetarla, ya que no trae pestillo y se abre fácilmente.
* El tiempo de elaboración que indico es orientativo con una fermentación lenta (invierno) y no incluye el reposo en nevera.
Si con la práctica y el uso voy encontrando más consejos sobre los gofres o la máquina Domo, os lo iré dejando aquí.
Estos son los gofres que te encuentras en los alrededores de la Grand Place, cuando paseas viendo a ver cual eliges. Son toda una tentación a la que los golosos no nos podemos resistir.
Aquí veis la textura de la masa de los gofres de Lieja ya fermentada, el chico los boleaba en esta mesa y los dejaba en una cámara hasta su consumo. Que era casi instantáneo :-)
Y como no, paseo alrededor de la Grand Place y gofre en mi mano era todo uno. Hubo un cartel en la calle que me llamó la atención, no me acuerdo en qué ciudad, pero decía algo como -no cuentes las calorías cuenta los momentos- y yo momentos me llevo un montón de mi viaje a Bélgica. Por aquí diríamos 'que me quiten lo bailao' ¿no?. Os recomiendo visitar este hermoso país y disfrutar de su gastronomía.
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