> Pescados
Ingredientes:
- 2 lubinas de 600 gr. cada una aprox.
- 5 patatas medianas.
- 1/2 copa de vino rancio o blanco.
- 1 limón.
- 1 cebolla grande.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Tomillo fresco.
- 1/2 vaso de agua.
- Sal.
Lubina al horno con cama de patatas y cebolla
Estos dos hermosos ejemplares de lubina llegaron a mi cocina casi aleteando. Directamente desde Mercabarna. Cada una pesaba alrededor de 600 gramos, así que con dos, tuve para cuatro raciones. Cuatro raciones, porque las acompañé en el horno de unas patatas y cebolla.
La lubina es un pescado de carne blanca y firme, de sabor sutil y refinado, muy apreciado en el mundo culinario. Hoy día no hay restaurante que se precie, que no tenga en su carta un buen plato de lubina.
Las principales formas de preparación son: al horno (como os la traigo hoy), a la sal (cubierta con una costra de sal gorda) y en papillote (cocción en papel de horno o papel de aluminio).
Su tamaño de captura es a partir de los 18 centímetros de longitud, estas lo superaban con creces, casi no me cabían en la bandeja del horno. Podéis usar vino rancio, como yo, o un buen vino blanco para darle sabor.
Como veis no he practicado ningún corte en el lomo del pescado, he preferido aliñarlo con el limón, la sal y el tomillo dentro. Así la carne del lomo queda más jugosa. También he cortado con las tijeras las aletas del animal, antes de meterlo al horno.
Elaboración:
Pelar y cortar las patatas en rodajas de medio centímetro de grosor. Cortar el limón y sacar dos rodajas que partiremos por la mitad.
Pelar la cebolla y cortarla burdamente.
Colocar la cama de patata y cebolla en la bandeja del horno, salar. Colocar encima el pescado, limpio de vísceras, con el limón las ramas de tomillo y la sal dentro. Rociar con el vino y el agua y un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra.
Hornear a 180º C durante unos 35 minutos. En el centro del horno y con calor arriba y abajo.
Servir recién salido del horno en la mesa, con la piel, así no perderá calor. Retirar la piel del lomo a cada comensal y acompañar de la guarnición, con un poco de jugo.