> Carnes
Ingredientes:
- 1 vaso de vino de Oporto (200 ml. aprox.)
- 500 gr. de manzanas.
- 30 gr. de mantequilla.
- 1 rama de canela.
- 2 clavos de olor.
- 50 ml. de vino blanco.
- 50 ml. de azúcar moreno.
- 200 ml. de agua muy fría.
- 150 gr. de harina común.
- 1 ó 2 solomillos de cerdo (800 gr. aprox.)
- Sal gruesa (opcional)
- Aceite de oliva virgen extra.
Solomillo de cerdo con reducción de oporto y puré de manzana
Uno de las piezas que más me gusta del cerdo, aparte del jamón, claro está, es el solomillo. Hacía tiempo que tenía en mente hacer este plato, sabía que iba a llevar la carne una reducción de un buen vino de Oporto, ya que me traje este verano una botellita de mi
viaje a Lisboa, y estaba deseando probarlo. Pero la guarnición no estaba segura.
A veces, cuando comienzo a cocinar, se me enciende la bombilla y ya sé cómo terminar el plato. A mi parecer, esta combinación de texturas, la crujiente de la tempura con el puré de manzana, va genial. Imaginaos el crunch de la tempura con la suavidad del puré, ¡ummmm!.
El solomillo es una carne muy tierna y por ello muy apreciada, ya que carece de tejido intermuscular, que son aquellos trozos que vemos a los niños y no tan niños luchar con ellos en la boca. ¿Verdad? Es el rey de los cortes, tanto de vacuno como de porcino.
Este plato no os resultará complicado si os organizáis bien. Lo primero que he hecho es la reducción de Oporto, que todo sea dicho, se me olvidó sacarle foto, ¡sorry!, al mismo tiempo hice el puré de manzana. Después, la tempura y por último la carne.
En esta receta he usado las manzanas de la variedad Fuji, porque me gusta mucho su dulzor. Pero podéis usar las que más os gusten. Ya os digo que terminaréis rebañando el cazo del puré, ¡palabrita del niño Jesús! (esto lo decía yo de pequeña mucho ¿vosotros no?)
Bueno vamos al lío.
Elaboración:
Comenzaremos por hacer la reducción de vino de Oporto. En un cazo pondremos el vaso de vino a fuego lento hasta que consigamos la consistencia de un jarabe. A la vez, ya que es lo que más tarda en hacerse, pondremos en otro cazo las manzanas sin piel y cortadas en dados junto con el azúcar moreno, los clavos de olor, la canela, la mantequilla y el vino blanco.
Dejaremos cociendo a fuego medio-bajo unos 25 a 30 minutos tapado. Removiendo de vez en cuando.
Una vez hecho sacaremos los palos de canela y los clavos de olor y trituraremos con la batidora.
Estaremos pendientes de la reducción del Oporto ya que unos minutos de más, pueden arruinar nuestra preparación.
Cortaremos la zanahoria en bastones, como os muestro en la foto. La zanahoria la haremos en tempura esto es, básicamente, agua muy fría con harina. Así que tener un recipiente con agua en la nevera hasta el momento de prepararla.
Echar el agua fría en la harina y remover hasta formar un masa ligera. Añadir sal. Poner una sartén al fuego con abundante aceite de oliva virgen extra, introducir los bastones de zanahoria mojados en la tempura y escurrir el sobrante de masa en el filo de la fuente. Freír un minuto aproximadamente. La verdura debe quedar 'al dente'.
Sacar la zanahoria a un plato con papel absorbente. Haremos esto hasta gastar toda la zanahoria.
En otra sartén amplia, echaremos cuatro cucharadas de aceite de oliva y cuando esté caliente pondremos a dorar el solomillo. Yo he optado por medallones de unos tres centímetros de grosor. Ir dorando por todos los lados hasta que se haga la carne, esto dependerá del grosor del solomillo y de nuestro corte.
Emplatar poniendo varios bastones de zanahoria en tempura sobre dos cucharadas de puré de manzana, un poco de reducción de Oporto y encima dos trozos de solomillo. Si os gusta podéis añadir un poco de sal gruesa por encima de la carne.