¡Receta divertida donde las haya! Estos cake pops de chicle desaparecerán en un momento de la mesa, si no os espabiláis, sólo probaréis las miguitas. Es una propuesta estupenda para la merienda de los niños, bizcochos en un palo y además con sabor a chicle, ¡genial!
La lubina al horno con patatas y cebolla es un plato que está en el recetario de muchas madres y abuelas. Es un pescado de carne blanca, sabrosa y sin demasiadas espinas. Se puede encontrar casi todo el año en las pescaderías ya que no tiene época de veda.
Esta ensalada de judias verdes con pollo marinado era lo que me pedía el cuerpo después de tantos excesos navideños. Es una ensalada muy fácil de preparar y resulta muy sabrosa, ya que el marinado del pollo lo he realizado con salsa de soja.
Si hay una tradición navideña por excelencia, es la presencia del chocolate en nuestras mesas. Hoy os propongo hacer nosotros mismos estos simpáticos renos con su trineo de chocolate. Los pequeños de la casa no tardarán en devorarlo en segundos.
He preparado esta estupenda receta para compartirla con la familia y amigos. Los pasteles de zanahoria no siempre tienen que ser dulces, estos son salados; llevan especias, hiervas y trozos de nuez. Deliciosos y fáciles de reparar para la cena, son ligeros y sabrosos, ¿podrás comer sólo uno?
Os propongo este dulce con aire inglés, para merendar en estos días de Navidad. Se prepara en menos de una hora y es perfecto para tomar con un té o café con leche. No resulta nada empalagoso y el relleno de nuez y fruta escarchada queda riquísimo.
Una deliciosa crema de marisco, preparada con ingredientes naturales y cocinada de manera tradicional, es la base de esta navideña receta . Para acompañar la crema he preparado unos riquísimos buñuelos de gambas. Es perfecta para cualquier reunión familiar, sólo tendréis que calentar la crema y freír los buñuelos, en 25 minutos, una comida de diez.
Este pollo con tapenade de aceituna negra de Aragón es todo un descubrimiento en mi cocina. Hace dos semanas que tengo el estuche de Lékué, y ya lo he preparado dos veces. Queda jugoso, tierno, sin necesidad de añadir grasas y con ese sabor tan especial que le da el paté de aceituna negra. ¡Vamos, para chuparse los dedos!
Al probar estas galletas craqueladas de chocolate no pensaríais que carecen de azúcar. Están buenísimas y os aseguro que desaparecerán en un abrir y cerrar de ojos de la bandeja. Aquí os dejo otra receta de galletas sin azúcar, que la disfrutéis.
Esta sopa de langostinos es muy sencilla de preparar, y con ella seguro que sorprenderéis a vuestros invitados. Con un agradable sabor a langostino, he incorporado arroz para hacer el caldo más cremoso y reconfortante. Es una sopa perfecta para preparar en Navidad.